No te identifiques a ti mismo con tus deseos. Dejar que los deseos nos definan es la forma más degradadante de la esclavitud. El dominio propio es la verdadera libertad. Podemos tener razones para querer hacer esto o aquello; pero querer hacer algo no es necesariamente una razón para hacerlo. Los deseos no son razones. “Gay” y “no gay” al igual que “heterosexualidad” y “homosexualidad” son términos ideológicos, y falsos. No existen. No hay “gay” o “no gay”
Read More