LA IGLESIA Y EL SEXO
Tenemos un problema y hemos estado contribuyendo al problema sin saberlo.
Durante demasiado tiempo se ha excluido a la Iglesia de los planteamientos culturales sobre la sexualidad. Muchos historiadores que estudian la historia del sexo atribuyen a la religión un efecto perjudicial sobre ella. "Según el libro de Reay Tannahill, 'El sexo en la historia', los años comprendidos entre el 400 y el 1000 d.C. vieron cómo la moral cristiana se apoderaba del pensamiento occidental 'de forma tan paralizante que solo ahora está empezando a relajarse'".
Nuestro error casi fatal ha sido que nuestro único mensaje sobre el tema es: "¡No!, no te dejes llevar por los malos deseos". A medida que la pornografía, el sexo casual y los medios de comunicación empezaron a influir en la cultura, fuimos condicionados por el miedo y la falta de entendimiento. Vivíamos aterrorizados mientras el mundo que nos rodeaba se deleitaba, y en el miedo, sentíamos la necesidad imperiosa de controlar las acciones de las personas. La Iglesia no sabía qué decir respecto al sexo, así que se limitó a decir: "No lo hagas". Ahora nos enfrentamos a las consecuencias de nuestra respuesta basada en el miedo. Es como el padre que no habla de sexo con su hijo hasta que tiene más de 14 años. Si el niño descubrió la pornografía a los 8 años, cualquier cosa que el padre le enseñe que contradiga lo que ha visto, será considerado una mentira. Cuando decimos: "El sexo tiene mayor conexión, intimidad y poder cuando se experimenta con un único compañero de vida dentro del matrimonio", se nos tacha de ignorantes, anticuados e incultos.
Solo podemos culparnos a nosotros mismos. Hace años nos apartamos de la conversación al no permitir que fuera una conversación en la Iglesia. Esta ha sido la controversia durante cientos de años: ¿Podemos ser santos y al mismo tiempo sensuales?
Nuestras familias e iglesias deben retomar esta conversación en nuestros hogares, grupos pequeños y, sí, incluso en nuestros púlpitos. Cuando todo el mundo en el planeta está hablando sobre sexo, y en las iglesias no tenemos nada más que decir que "no", nuestro silencio se vuelve determinante. En una mesa de personas intelectuales que están al tanto de los eventos actuales, a menudo se puede notar rápidamente aquel con poco conocimiento sobre el tema. Rara vez hablan y cuando lo hacen, lo hacen en mal momento y su fundamento es casi irrelevante, exponiendo lo poco que realmente saben sobre el tema. En cuanto a la sexualidad, la Iglesia debe llegar a ser la más instruida... y no la que tiene poco conocimiento. El creador del universo, nuestro Dios, creó el sexo. ¿Quién mejor para enseñar sobre sexo que la Iglesia?
Como pastores y líderes, es imperativo que volvamos a comprometernos a aprender para que podamos proporcionar respuestas y soluciones reales a las personas que lideramos. Como líderes, aquí hay algunas cosas prácticas que podemos hacer para recuperar el equilibrio.
1. Sé vulnerable... en público y en privado.
Esta generación quiere ser capaz de relacionarse con nuestra humanidad, no con nuestra perfección. Por un lado, escuchar la historia de un líder que hizo las cosas bien es una prueba inspiradora de que es posible. Por otro lado, las personas quieren conocer las dificultades que ha tenido su líder para triunfar. La mayoría de las personas se perciben como quebrantadas, así que compartir nuestro dolor los atrae más que la percepción de la perfección. Abre tu corazón a las personas que lideras, sé abierto, sincero y vulnerable. Comparte algunas de las cosas que has superado. La profundidad de tu vulnerabilidad determinará la integridad de tu iglesia.
2. ¡Celebra el sexo y ten buen sexo!
Necesitamos restaurar la verdad: "el sexo es de Dios". Tenemos que desmantelar la idea de que la religión y el sexo son enemigos. Considera los mensajes que tus hijos están recibiendo: los medios presentan el sexo antes del matrimonio como divertido, erótico, excitante y casual. Al contrario, en el matrimonio el sexo es raro y una responsabilidad. Cuando las parejas cristianas hablan de ello, hablan sobre como el no tener sexo les crea tensión en su matrimonio. ¿Qué tipo de visión es esta para nuestros hijos? Debemos estar dispuestos a hablar de como el sexo es grandioso cuando se experimenta de la forma en que Dios lo diseñó. Tal vez como líder tienes que dar el primer paso, al trabajar en crear una buena vida sexual con tu cónyuge.
3. Comienza temprano y quédate hasta tarde.
Debemos dejar de pensar que la "charla sobre sexo" es sólo para los adolescentes. La edad media de exposición a la pornografía es de 8 a 11 años. Si seguimos esperando hasta que sean adolescentes, seguiremos llegando años tarde a la conversación. Acabemos con la idea de "La charla". Esto genera mucha presión para que todo sea perfecto, en el momento correcto y generalmente se define por la ansiedad en lugar de la claridad. En su lugar, debemos crear un ambiente de confianza en nuestros hogares para que nuestros hijos puedan hacer cualquier pregunta en cualquier momento. Por otra parte, nuestros matrimonios necesitan más que nunca esta conversación. Muchas conferencias matrimoniales carecen de la profundidad en este tema del cual la cultura tiene hambre. Un artículo de www.verwillmind.com informa que el 50% de las parejas están insatisfechas con su vida sexual. Personalmente, creo que nuestras actuales tasas de divorcio están directamente relacionadas con la carencia de satisfacción sexual dentro del matrimonio. ¡Ayudemos a nuestros matrimonios a tener buen sexo!
Para liderar y pastorear bien debemos liderar en todas las áreas. Nuestro mensaje debe ser la verdad y nuestro lenguaje el amor. Cuando celebramos lo que Dios creó, honramos su capacidad creativa. Cuando demonizamos lo que Él diseño, le damos permiso a otros de definirlo. Hablemos la verdad, celebremos el sexo y empoderemos a nuestras familias para tener hogares saludables.
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MÁS INFORMACIÓN
1. (The): https://www.independent.co.uk/life-style/love-sex/culture-of-love/a-brief-cultural-history-of-sex-938527.html
2. https://www.verywellmind.com/what-marital-sex-statistics-can-reveal-2300946
