POR QUÉ LOS PROPÓSITOS DE AÑO NUEVO NO FUNCIONAN CON LA ADICCIÓN AL SEXO
Es año nuevo y muchas personas se han propuesto cambiar su vida de un modo u otro, ya sea para adelgazar, ponerse en forma o cambiar un mal hábito.
El cambio forma parte de la vida. Aunque a veces simplemente venga sobre nosotros, sin que lo hagamos intencionalmente, el cambio es esencial para tener una vida mejor. Es más, una propuesta de cambio implica decisión, no solo para proponérselo, sino que hay una serie de decisiones que nos llevan al cambio.
Richard Koestner, profesor de psicología de la Universidad McGill, investiga y enseña sobre la formulación de objetivos, la autorregulación y los procesos de interiorización. En un artículo titulado "Reaching one's personal goals: A motivational perspective focused on autonomy" (Alcanzando las metas personales: Una perspectiva motivacional centrada en la autonomía), analiza por qué tanta gente no cumple sus propósitos de Año Nuevo. Afirma:
"El 22% de la gente fracasa después de solo una semana, el 40% después de un mes, el 50% después de tres meses, el 60% después de seis meses y el 81% después de 2 años*".
Lamentablemente, la mayoría de la gente no cumple sus propósitos de Año Nuevo.
¿Por qué fallamos?
La investigación de Koestner también reveló que la gente hace propósitos de Año Nuevo que se centran en compromisos conductuales. En otras palabras, la mayoría de nosotros no queremos seguir viviendo con malos hábitos, poco saludables y nocivos. Del mismo modo, con la pornografía y la adicción al sexo, la mayoría de las personas que están atrapadas estos comportamientos sexuales compulsivos desviados dirán que no quieren continuar en ese estilo de vida, debido a la confusión personal, relacional y espiritual que resulta.
La mayoría de las personas involucradas en conductas sexuales desviadas viven en un conflicto interno continuo, lo que resulta en una vida de secreto, vergüenza, desconexión y desesperación.
Aunque existe el deseo de poner fin al comportamiento sexual desviado, el camino para cumplir la resolución de dejarlo no es tan fácil de recorrer. Koestner ha identificado tres razones principales por las que no se consiguen los objetivos propuestos.
1. Objetivos poco claros y vagos.
2. No medir el progreso hacia los objetivos fijados.
3. Escaso autocontrol y autorregulación ante los retos que impiden alcanzar los objetivos fijados.
Tony Robbins advierte: "Si haces lo que siempre has hecho, conseguirás lo que siempre has conseguido".
Tener un plan estratégico para cumplir nuestros objetivos es vital para conseguir lo que queremos, pero los sueños y las visiones no suelen ocurrir solo porque nos propusimos hacer algo.
Usa el impulso de la motivación para lograr el cambio
Aunque tener objetivos específicos y medibles es importante para el proceso de cambio, es nuestra motivación para seguir cambiando aún en la tentación lo que determina si realmente cambiaremos o no.
Casi cualquier empresario, deportista, padre o terapeuta estaría de acuerdo en que el verdadero cambio se produce a través del desarrollo, la práctica repetida y el ajuste. Normalmente, el cambio no se produce de forma espontánea, sino con el paso del tiempo, a través de un propósito y una determinación intencionales.
Por lo tanto, en lo que respecta a la adicción a la pornografía y al sexo, el propósito de "esta es la última vez..." debe ir acompañada de una motivación sostenida para cambiar realmente.
Aquí hay 3 consejos para mantener la motivación para cambiar el comportamiento sexual compulsivo.
1. LA DESESPERACIÓN DEBE LLEVAR A LA DETERMINACIÓN
Debemos darnos cuenta de que el deseo es solo la primera fase de la realización de nuestro sueño de libertad y de una vida plena. En algún momento, nuestra desesperación por cambiar debe traducirse en determinación para el cambio.
El hecho de que digamos que queremos detener la conducta sexual no deseada no significa que los impulsos que nos tientan a hacerlo vayan a detenerse. Al contrario, a menudo se intensifican hasta que se satisfacen.
El camino hacia el cambio comienza con la determinación, se sustenta en la determinación y se completa con la determinación, sin importar del tiempo que lleve.
2. LA FUERZA DE VOLUNTAD DEBE TENER UN PLAN
Cumplir los propósitos de cambio requiere una fuerza de voluntad determinante, pero la fuerza de voluntad debe dirigirse hacia una visión positiva que nos lleve al destino del cambio que deseamos.
La fuerza de voluntad por sí sola, sin una dirección, es como un excursionista perdido en las montañas sin brújula ni mapa. Hay muchas historias de excursionistas que han vagado tenazmente por el desierto y han seguido avanzando, pero se han encontrado justo donde empezaron.
La forma más eficaz de cambiar los hábitos sexuales no deseados es desarrollar y seguir un plan práctico que conduzca al destino deseado de bienestar.
3. LA AUTOAYUDA DEBE PROPONERSE EL OBTENER AYUDA
El proceso hacia la libertad y el bienestar requiere la ayuda de personas que conozcan el camino y puedan proporcionar apoyo a lo largo del mismo.
Es muy difícil mantener la visión y la motivación para ceñirse al plan de cambio cuando intentamos hacerlo solos. Hay demasiados obstáculos conocidos y desconocidos, y cuando se producen contratiempos, es difícil animarse de forma eficaz a sí mismo en las cosas que hay que hacer para continuar el viaje hasta el destino final.
¡Este año promete ser un gran año para el cambio!
La pregunta que debemos plantearnos es si nos limitaremos a hacer otro propósito de Año Nuevo o si tendremos la determinación de llevar a cabo el cambio. La respuesta a esta pregunta determinará el grado en que vivamos libres y vivamos bien.
Referencias:
*Koestner, R. (2008). Reaching one's personal goals: A motivational perspective focused on autonomy. Psicólogo canadiense, 49(1), 60-67.
Este artículo se publicó originalmente en inglés en: FreedomU
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